A pesar de haber vivido por mucho tiempo junto a sus cinco hijos en ese hogar, Clara ha sido desalojada sin compasión
Clara es madre de un joven de 16 años y cuatro niñas pequeñas, ahora los seis están en riesgo de ser echados a la calle, de la casa que su madre le dejó por herencia. La historia se remonta siete años atrás, cuando la madre de clara falleció y le dejó la casa a sus dos hijas. Por ese entonces, la señora tenía un juicio pendiente con Rafael Rímac Leiva, quien según Clara, con artimañas, logró registrar la casa a su nombre.
Este hombre le habría vendido la casa a su hija en el año 2015 y ella al año siguiente se la vendió a una tercera persona de nombre Celestino Pariona. Este hombre registró el inmueble a su nombre y denunció a clara por usurpación, para que abandone lo que consideraba su propiedad.
La botaron
En el 2018, pese a tener ocho tornillos y una plaqueta dentro del brazo izquierdo producto de un accidente, Clara fue desalojada de la casa sin compasión. Tras este desalojo, ella tuvo que dormir en la calle con sus hijos, pues habían colocado ladrillos para que ella no pueda ingresar. Pero, al ver lo que sucedía, los vecinos decidieron sacar los ladrillos para que la familia pueda regresar a la vivienda.
El señor Celestino le ha ofrecido a Clara comprar la casa que fue suya a 40 mil dólares, pero evidentemente ella no cuenta con esa suma y considera ilógico pagar por una casa que le pertenece. Pero mientras todo esto ocurre, ella y sus hijos podrían ser nuevamente echados a la calle.